Homenaje póstumo último adiós a Saúl Vara
10/01/2011 -
Zaragoza, Coah.- “¡Ciudadano arquitecto Saúl Vara Rivera!, ¡Presente!, ¡Ciudadano arquitecto Saúl Vara Rivera!, ¡Presente!, ¡Ciudadano arquitecto Saúl Vara Rivera!, ¡Presente!”, eran las voces unísonas de ediles, funcionarios, trabajadores y pueblo en general al momento de hacer el pase de lista durante lo que sería su última sesión de Cabildo como presidente municipal, haciéndose presente a través de su gente de Zaragoza.El solemne y emotivo acto celebrado alrededor de las 4 de la tarde en la explanada de la Presidencia Municipal y en el Paseo de los Centenarios, congregó a cientos de personas que acompañaron en su sentimiento de pésame a la familia Vara Garza, a su esposa María de Lourdes Garza Moreno y sus hijos Saúl, Abelardo y Daniel.Correspondió al secretario de Ayuntamiento, profesor Antonio Briones Villarreal dar lectura a la orden del día, en el cual se dio uso de la palabra a la regidora Mercedes Angélica Sánchez Saucedo, la profesora Norma Velásquez, el profesor Sergio Flores de Hoyos y del primer regidor, Víctor Saucedo.Se realizaron guardias de honor por parte de los miembros del Cabildo, directores de departamento, presidentes municipales de la región y la entrega del escudo del municipio de Zaragoza a la señora Lourdes Garza de Vara y a sus hijos, en medio del llanto y el nutrido aplauso y prolongado de todos los asistentes.En el homenaje póstumo, el gobernador Jorge Torres López fue representado por el secretario de Desarrollo Social, licenciado Luis Gerardo García Martínez, y con el subsecretario de Asuntos Jurídicos del Gobierno del Estado, Sigfrido Macías, quienes hicieron guardia de honor en el acto.La profesora Norma Velásquez López, directora del Centro Recreativo Santa Fe, con palabras entrecortadas por el llanto, reconoció en Saúl Vara ese gran espíritu de colaboración para con todos los funcionarios.“Ésta es nuestra última reunión contigo, porque Dios Nuestro Señor así lo ha querido, pero quiero decirte, porque sé que nos están escuchando, que estos servidores seguirán colaborando como si tú estuvieras con nosotros aquí presentes, porque gente emprendedora como tú estarás en el Reino de Nuestro Señor y desde ahí estarás enviándonos todas sus bendiciones a tu familia y a este gran equipo, con tu Cabildo, para seguir trabajando como a ti te gustaba por el bien de nuestro pueblo”, expresó.Saúl, no te vamos a decir adiós, sino hasta luego, dijo la profesora Norma.Por su parte, la regidora Mercedes Sánchez Saucedo dijo: “Estamos aquí reunidos para darle el último adiós a Saúl, el compañero de escuela, el amigo y el político que me invitó a formar parte del Cabildo, con las indicaciones siempre de servir a los demás”.“Hoy a pesar del dolor que nos une, debemos mantener viva la esperanza que Saúl no nos ha abandonado para siempre, porque la muerte no es un adiós definitivo, sino un hasta luego; su muerte ha dejado tristeza y un vacío muy grande que con nada podemos llenar, pero debemos pensar que para él es al revés, ha conseguido el amor de Dios para siempre”, expresó.Correspondió enseguida al profesor Sergio Flores de Hoyos, quien destacó en Saúl Vara Rivera, al hombre, al amigo, al funcionario, con un reconocimiento justo por lo que fue.“Fue siempre un amigo entrañable, Saúl solía comentarme que cuando estaba con un amigo, nunca estaba solo y que no se trataba de buscar muchos amigos, sino de conservar los que tienes; una de las cualidades y las virtudes que hacen más grande al hombre es la amistad”, dijo.Saúl como servidor público fue una persona abierta y que se desvivió hasta llegar a los lugares más recónditos con el deseo de servir, y así lo pueden constatar las gentes de los ejidos El Remolino y Progreso, entre otras comunidades, con quienes tuvo un lugar preponderante para servir a las gentes más necesitadas.“Saúl fue una persona muy humana, siempre tuvo ese tesón, esa luz encendida para servir a su pueblo de Zaragoza, buscando siempre la solución a los problemas”, subrayó.Más adelante, en su calidad de primer regidor, Víctor Saucedo Gómez declaró que el municipio ganó con entrega, dedicación y empeño de este gran zaragocense.Saúl siempre decía que detrás de todos sus afanes y esfuerzos está primero el bienestar del ser humano.“Hablar de Saúl es hablar de gran sensibilidad y de gran nobleza, siempre le apasionó convivir con el pueblo, manteniéndose fiel a su origen y ser auténtico; un hombre vertical, riguroso consigo mismo y exigente con sus amigos, pero brindando siempre una gran lealtad”, expresó.Su paso por la presidencia fue generoso en acciones que sin mencionarlo saltan a la vista; su máxima aspiración fue la de contribuir al progreso del municipio.Hoy Saúl se ha ido, pero nos deja su ejemplo y su sentimiento de afecto, nos deja sus ideas y nos deja su responsabilidad a sus compañeros y amigos de trabajo de hacer honor a su legado.“Todos tenemos un compromiso con Saúl, una tarea que cumplir para mantener viva su memoria, pero más allá de todo nos queda su ejemplo vibrante y bello, un hombre que supo enfrentar la adversidad con capacidad y decisión, carácter y buena disposición; nos queda el recuerdo del amigo de sonrisa franca, profunda y amplia, de las ideas serenas, del juicio crítico pero fundado, del hombre fraternal que tanto nos enseñó con su tenacidad”, dijo.Al término del homenaje póstumo se soltaron cientos de globos blancos como símbolo de la paz, la convivencia y la amistad, con el cariño de todo el pueblo de Zaragoza para que lleguen hasta las puertas del cielo donde descansa Saúl en el Reino de Dios, mientras la banda de guerra del CBTA de Zaragoza tocaba el redoble de un minuto de silencio y tres dianas en honor de este gran hombre, gran padre de familia, gran esposo, gran hermano, gran presidente municipal, pero sobre todo un gran ser humano.Lamenta PRI muerte de edilEl presidente del Comité Directivo Estatal del PRI en Coahuila, José Luis Flores Méndez, lamentó profundamente la muerte del compañero de partido y alcalde del municipio de Zaragoza, Saúl Vara Rivera, al tiempo que demandó de las autoridades correspondientes una profunda investigación para esclarecer este hecho.Además y a nombre del priísmo coahuilense, envió sus condolencias a los familiares y amigos del desaparecido servidor público, a los que deseó pronta resignación por tan lamentable pérdida.Flores Méndez recordó que Vara Rivera fue un buen priísta y reiteró que las autoridades correspondientes deben llevar a cabo una exhaustiva investigación y esclarecer los hechos.“Hoy el PRI está de luto y acompaña en sus sentimientos a su familia, a la que le envío nuestros deseos por una pronta resignación”.Estoy orgulloso de mi padre“Mi padre, el arquitecto Saúl Vara Rivera, regresó a su pueblo, a su Zaragoza de su vida y de su muerte, estoy orgulloso de él”, así se expresó ayer en la noche Abelardo Vara Garza, durante una pequeña conferencia de prensa a la que citó para agradecer las muestras de cariño y apoyo que han recibido desde el momento en que se conoció la muerte del alcalde Saúl Vara Garza.Abelardo, el hijo mayor de Saúl Vara Rivera, fue quien acudió a buscar a su padre y quien junto con el tesorero Roberto Ramírez Villarreal tuvieron a su cargo la identificación y traslado del cuerpo del arquitecto Vara Rivera.“No estoy triste, estoy orgulloso del padre que tengo, porque todavía lo tengo conmigo, él no se ha ido, él está aquí conmigo, yo sé que él es el que está aquí, él es el que está dando esta declaración, no soy yo”.Con la voz entrecortada por el dolor que le ocasiona la pérdida de su padre, Abelardo señaló que no tiene suficientes palabras para agradecer todo el apoyo recibido de las dependencias, los medios de comunicación, del pueblo y de la familia que no los ha dejado ni un momento solos en el duro trance por el que están pasando.“Mi papá era una persona de principios y valores, nos enseñó a toda la familia la humildad, a estar unidos, sobre todo en estos momentos que es lo que más se necesita hacer, por eso a nombre de mi familia, muchas gracias por todo”.Abelardo Vara Garza toma aire para continuar agradeciendo el apoyo recibido y señala que los hombres grandes nunca llegan a viejos, refiriéndose a que su padre apenas cumpliría los 49 años el próximo mes.Por ser el primogénito, Abelardo sabe que ahora es el hombre de la casa y que como tal tiene que apoyar a sus hermanos y a su madre. “Tengo que sacarlos adelante, siempre con el legado de mi padre, con lo que él me enseñó, voy a seguir sus pasos para llevar y sostener a esta familia”, señala el joven que le ha pedido a Dios que le dé fortaleza y se la ha dado.Abelardo reitera que está orgulloso de su padre, al igual que toda la familia, por los valores que les enseñó y recalca que era un hombre bueno, una persona correcta que le gustaba apoyar a la gente y que la familia estuviera unida.